Si observamos las tripas de algunos
sondeos de intención de voto nos podemos encontrar con más datos que los
meramente: ¿A qué partido va a votar usted? Por ejemplo el peso que tiene cada
segmento de edad en el voto ideológico.
El 52,08% de los jóvenes entre los 18 y
los 30 años elijen la abstención como forma de votar en unas elecciones. El 9,46%
votan a “otros” que suelen ser nacionalistas. Un 1,56% votan blanco o nulo. Un
9,81% votan derechas. Un 27,08% votan izquierdas.
Es decir, de los jóvenes entre 18 y 30
años, un 53,64% son votos no válidos y nos queda un 46,36% que SI votan. Si
quitamos el voto de “otros”
del total que previsiblemente también se repartirán entre
izquierdas y derechas en opciones parecidas al resto, queda un 34,03% de
jóvenes que votan a izquierdas y un 12,33% de jóvenes que votan a derechas.
Curiosamente es un número muy parecido a
la suma total de voto de izquierdas que se obtienen entre los votantes que se
mueven entra la edad de 45 a 65 años. La suma de voto declarado de izquierdas es
bastante menor en este segmento de edad, pero en cambio como acuden a votar un
número mayor de personas pues la abstención es menor en 17 puntos en relación a
los jóvenes, el número final de votos que van a izquierdas es similar en número
al de los jóvenes.
Y en cambio los partidos políticos de
izquierda no atienden por igual al grupo de jóvenes que al grupo de adultos en
la edad final de su periodo laboral. A partir de los 65 años de edad el voto se
vuelve muy conservador y además es un segmento que acude mucho a votar, siempre
que la propia salud se lo permita.
Y nos queda el voto del segmento entre
los 31 y los 44 años, que es un voto totalmente soso, anodino, pues tiende a
votar a caballo ganador pero en unas proporciones muy similares entre los
partidos que van en cabeza. Es un segmento bastante abstencionista, pero quien
acude a votar es además de fiel muy repartido entre las diversas opciones.
Si los partidos quieren repescar entre
los abstencionistas, sin duda hay que acudir a los jóvenes si eres un partido
de izquierdas, y a los mayores de 45 años si eres una agrupación de derechas.
Pero si quieres que cambien el sentido de voto los que van a votar de siempre,
hazlo al revés. Si eres conservador intenta pillar a nuevos jóvenes y si eres
de izquierdas invetiga de qué manera puedes incidir entre los mayores de 45
años.