12.9.23

La Historia es aburrida y no hay que estudiarla. No vayamos a enfadarnos


Decía Xavier Altamirano Molina, nombrado subsecretario de Derechos Humanos en el actual gobierno del presidente chileno de Gabriel Boric, que habían fallado como sociedad pues no han logrado en Chile que se conozca la historia, y también hemos fallado a nivel de la educación, pues no hemos logrado explicar suficientemente nuestra historia, para demostrar que la democracia es mejor que un régimen autoritario.

Cuando en España hablamos de Memoria Histórica nos olvidamos muchas veces de potenciar la Educación hacia las personas que deben conocer la historia de su país. No se publicitan libros sobre la historia de España, de ningún siglo pero sobre todo menos del siglo XX.

Las nuevas generaciones van a ir creciendo sin querer saber qué sucedió en los años en los que vivían sus abuelos. Pero ese olvido está programado, no es una casualidad ni una innecesaria labor. Es que algunos no quieren que las nuevas generaciones sepan lo suficiente.

Dicen que es para que no crezcan en el odio, en el dolor. Nos vuelven a tratar como a bebés idiotas. Si podrían ver dolor es ya una buena pista para asegurar que la única manera de evitar su repetición es conocer qué sucedió y por qué.

Y no, no se trata de culpabilizar a nadie, a ninguna ideología actual, se trata de que hay que saber con calma y limpieza lo que nuestros abuelos tuvieron que aguantar y sufrir o gozar, depende de quienes.

No conocer la historia… pero hablar millones de minutos de un beso o de una pelota que entró entre unos palos, es reconocer que estamos manipulando las necesidades reales de ser adultos libres. Vivimos pegados a las mentiras piadosas que nos hacen creer que hay que ser felices por obligación. Felices, domados, silenciosos, calmados y confundidos.

Bien, tampoco me tengo que enfadar porque no se quiera conocer la historia de las sociedades, de los países. Tampoco me queda ya tanto de estar por estos bosques. Vosotros tenéis que ir decidiendo. 

Ajovín