La crisis afecta a todas las empresas en mayor o menor medida y Renfe se ha dado cuenta que los precios del AVE deben modificarse y adaptarse al cliente y al tipo de viaje. Para ello y a partir de 2012 se van a planificar diferentes tarifas según el tipo de tren AVE y ALVIA, horarios y demanda.
No costará lo mismo un tren que llegue al destino en horario ideal para hacer gestiones profesionales que otro que llegará a su destino en horario más familiar o de ocio, que se puede planificar con más tiempo y no es un billete adquirido en el último momento.
No es lógica la enorme diferencia de precio por ejemplo para ir de Zaragoza a Madrid comparado entre tren AVE o en autobús. No es lógico para Renfe ni para los usuarios que los AVE vayan medio llenos o incluso casi vacíos en algunos horarios, mientras que la demanda de autobuses crece y se llenen en casi todos sus horarios y servicios.
Imponer unas tarifas altas supone que el cliente termine por buscar otras alternativas y vea la enorme diferencia de precio entre trayectos intermedios sobre todo, en los que una hora de más o de menos no es tanta diferencia de servicio.
El sistema de compra de billetes de AVE en la página de RENFE por Internet funciona muy bien y es la mejor manera de plantear estos precios variables según día y horario, para que el cliente pueda elegir según le convenga. Funciona muy bien en Francia, no ha funcionado en Alemania. Hay que saber realizar las formas y la publicidad para no engañar al cliente con precios que luego casi nunca existen.
