30.3.09

Estoy en contra de los que dicen que hay que ser muy claros

Estoy en contra de los que dicen que hay que ser muy claros, si, de esos que cada vez abundan más, que se empeñan en asegurar que hay que ir por la verdad por delante, que no hay que disimular, que hay que decir lo que se piensa.
Se equivocan en algo fundamental, ellos dicen SU verdad por delante, no LA verdad.
Decir SU verdad es de lo más sencillo, lo complejo es saber callarse por respeto, es saber distinguir lo que se debe decir y lo que hay que callar por educación y convivencia.
Yo no veo ningún valor humano en es espetando a los demás todo lo que se piensa de ellos, al contrario, me parece una forma absurde de producir dolor y rabia.
Yo a tí, no te digo lo feo que eres, lo mal que vistes, lo pobre que me pareces, lo mal que te llevas con tu familia, el piso tan viejo que usas, lo poco que has logrado crecer en tu profesión. Lo asumo como algo inevitable y que cada uno llevamos como unas circustancias de vida que nos acompañan. Me puedes parecer pedante, soso, aburrido, pero es posible que sea simplemente mi aprticular forma de mirante.
Y en el caso de que yo tuviera razón para llamarte con un adjetivo duro, me pregunto, ¿para qué serviría recordarte lo que eres?.
No, yo prefiero ser más educado, callerme lo que creo que puede hacer daño, y seguir conviviendo mirando a los ojos de todos, con calma y empatía.