6.2.18

La economía mundial vuelve a pillar gripe

Hoy todas las Bolsas del mundo están cayendo. Y nos podemos seguir diciendo a nosotros mismos lo básico. —Eso no va conmigo. ¿Seguro que no va contigo? Como no hay dinero suficiente para sujetar y garantizar todos los movimientos económicos que se producen cada día en el mundo, si coge gripe la economía del mundo, los medicamentos los tenemos que pagar a medias.

Si la Bolsa baja un 6% por poner un ejemplo, todo pierde un 6% de valor. Y como todo es papel y se sujeta entre ellos mismos, hay que generar un 6% de valor añadido para compensar. ¿Cómo? Pues una de las formas es subiendo los ingresos. Sea subiendo el valor del dinero REAL que hay —que cada vez hay menos en relación a la economía que se mueve— o bien subiendo los impuestos de TODOS para compensar lo que se pierde.

Dicho de otro modo más sencillo. No hay dinero real que soporte tanto experimento diario. Sea dinero ORO o dinero que tenga valor de verdad. Sea grano, petróleo o cabezas de ganado. La inmensa mayoría del dinero son ceros apuntados en un papel muy bonito. Sin nada detrás.

El peligro de esos ceros, los mismos ceros con los que nos pagan el sueldo, compramos pisos o nos conceden un préstamos, es que su valor está moviéndose por circunstancias que los individuos no podemos controlar. Y no me refiero solo a la inflación.

Cuando eres socio de una empresa, una cosa curiosa es la ampliación de capital. Imagínate una empresa con 500.000 euros de capital social. Tú tienes tus ahorros, entiendes y trabajas en ella y decides meter 50.000 euros para montarla con otros socios. Tienes pues un 10% de esa empresa.

Pero esa empresa crece, necesitar ampliar o al contrario le van mal las cosas y el banco no le concede un crédito ni para el papel de la facturación, excepto si amplía el capital social en otros 500.000 euros. Esto es algo muy habitual.

Cada socio debe aportar más dinero. Tú no tienes suficiente para cubrir ese 10% y decides poner 20.000 euros más de aquellos iniciales. El resultado final es que a partir de ese momento y poniendo de tu bolsillo otros 20.000 euros, has bajado de tener un 10% de la empresa, a tener un 7%.

Algunos dirán que un 7% de un millón es más que un 10% de 500.000. Y parece cierto si es para crecer y ampliar. Pero si es para enjugar deudas o para demostrar ganas de continuar luchando, ya no es tan cierto. 

Cuando algo pierde valor, o las ponemos encima de la mesa o nos quedamos con menos “cosa”. Y en eso nadie se salva, pues en la economía mundial todos somos socios. Aunque creamos que eso no va con nosotros. 

O las ponemos por las buenas, o nos las pondrán por nosotros en forma de más impuestos o subidas de precio e inflación, a corto o medio plazo. O tendremos menos acciones, es decir seremos más pobres en el mundo que nos rodea. Tendremos menos influencia y menos capacidad de decisión.