5.4.08

Cómo ser más feliz o el pensamiento positivo y la libertad

Mañana vamos a ser todos un poco más felices. Es sencillo el ejercicio.
Creo.
Se trata de cambiar tus pensamientos ligeramente. No tener pensamientos negativos, porque de lo que estamos todos seguros es, de que tú sí eres capaz de controlar tus propios pensamientos.
Si mañana alguien piensa (o tú crees que piensa) algo negativo sobre tu persona, debes preguntarte qué es más importante para tí, si lo que piensa esa persona o lo que piensas tú de tí mismo.
Es muy seguro que lo que te hace daño no es tanto lo que el otro te diga o piense, sino lo que tú le dejas que te entre en la mente, lo que admites como su verdad, lo que asumes de su forma de pensar. Incluso de lo que crees que piensa y que no es cierto que lo piense.
Realmente a tí te tiene que dar igual lo que los otros piensen. No sirve para nada sus pensamientos, excepto si libremente los asumes. Para bien o para mal.
Pero si los asumes, vuelves a dar más importancia a lo que otros piensan de tí que a lo que tú mismo piensas de tu vida.
Para ser más libre necesitarás creer más en tí mismo y mucho menos en lo que piensan los demás sobre tu vida.
Si piensas en negativo, esos pensamientos te crearán sentimientos negativos. Te sentirás mal porque piensas mal.
Si eres capaz de controlar tus pensamientos, eres capaz de controlar tus sentimientos.
En cuanto dejes de pensar en negativo, dejarás de sentir en negativo. Te importas tú, sólo tú. Los demás son importantes porque te acompañan en la vida, pero no deben controlar tus sentimientos. Nunca. O dejarás de ser libre.