5.6.08

Autoayuda para quien quiera empezar a escribir

Escribir es una actividad para la que todos estamos preparados, una actividad placentera que ayuda tremendamente en la tranquilidad de espíritu y al crecimiento personal. Escribir no es una actividad reservada solo a los profesionales de las letras, como cocinar o pintar la pared de su salón no lo es para personas que viven de esa actividad. Usted puede disfrutar y compartir con sus allegados una excelente paella, un carne a la brasa, un pescado a la sal o unos poemas. Nada de este le está vedado, y lo curioso es que además puede hacerlo de una manera fácil.
Escribir es tan sencillo como hablar, y se aprende escribiendo y tirando a la basura muchas hojas de papel. No debe ponerse como meta emular a Camilo José, como es posible que no desee llegar a ser tan conocido como Ferrán, sino simplemente disfrutar. Y escribir es una actividad con la que se puede disfrutar y mucho. No se preocupe en un principio por cometer faltas de ortografía o por no saber ordenar bien sus pensamientos, poco a poco mejorará y se preocupará de aprrender y mejorar, pero que el miedo a no hacerlo bien no se impida disfrutar de la escritura.
Inténtelo, coja unas hojas en blanco, un documento vacío de su procesador, y póngase a escribir sobre esta decisión que acaba de tomar. Juegue a escribir, si, juegue a llevar un diario aunque tenga 50 tacos, disfrute escribiendo cartas a un personaje inventado, o lo que incluso resulta más arriesgado, disfrute escribiendo cartas siendo usted un personaje inventado.
Escribir es un juego de laboratorio, en donde va a construir con las palabras, pero sobre todo con los personajes. Puede disfrazarse o poner en boca de otro lo que a usted le sucede, puede cambiar de fisonomía, ser un joven o un viejo cascarrabias.
Y no piense en publicar como tampoco piensa en llegar a montar un restaurante cuando hace las paellas. Simplemente se abandone a escribir pensando en sus nietos, en usted mismo, en dejarse llevar por las situaciones. ¿Qué de donde puede sacar el tiempo?, yo les voy a decir un pequeño secreto personal. Amplié mis tiempos de escritura en los periodos de anuncios entre programas de televisión. Ahora escribo en vez de ver programas de televisión y dedico los cortes de anuncios a hablar con mi parienta que también descansa de estar ensimismada en esos momento. Nadie le obliga a estar mirando la misma pantalla que el resto de personas, y tener hoy un portátil entre las piernas es una opción para un buen cumpleaños.